viernes, 22 de julio de 2011

Cuando la locura se convirtió en ciudad


No se si mirar a derecha o izquierda, porque vienen por todos los lados. He visto a una cabra adelantar a una vaca mientras una moto con su padre y cuatro niños rozaba el taxi que venía en dirección contraria. Me decido a cruzar la calle y me quedó atónito al ver a un lugareño driblar a tres coches sin apenas inmutarse y una estúpida pregunta viene a mi cabeza ¿Quién es el valiente que se atreve a ir a la autoescuela aquí? No hace mucho, recuerdo que me decían que no fuera a Paris en coche, que aquello era la locura…. Paris es la Babilonia de la conducción, aquello no es tráfico, son sólo máquinas que circulan bajo las normas impuestas. Aquí todo es distinto, no existen las leyes, cruza cuando puedas manín y luego echa un vistazo por si viene algún coche, o una cabra o cualquier cosa con ruedas. Aquí las bacas no van encima de los coches, aquí las vacas tiran de ellos. Menos mal que son sagradas.

Y sí amig@s, esto es Mumbai, esto es el corazón surrealista de la  India, un lugar que, aunque solamente lleve tres días, no ha dejado de sorprenderme a cada paso que doy, cada minuto es distinto al anterior. Esa húmeda locura tropical hace que me sienta muy pequeño, con mucho que aprender en esta vida, apenas soy un principiante en vías de desarrollo y todavía borracho de inexperiencia. Queda mucho por andar….

Y si hablamos de surrealismo no podríamos olvidarnos de ese cuadro del que hoy he formado parte. Podríamos llamarlo “La rendición del más primo”. He preguntado donde tirar una cajetilla vacía de tabaco ya que no encuentras una papelera por más que busques, por lo que decidí ser uno más y tirar las cosas al suelo. En mi descanso laboral salí a fumar ese cigarrito que tanto apetece después de comer y al acabarlo y tirarlo al suelo para que acompañara a las veinte bolsas de plástico, a los doscientos treinta papeles que me rodeaban y a un numero infinito de partículas que no sabría muy bien explicar de donde habían salido, fue en ese momento cuando dos jóvenes con indumentaria gubernamental me asaltaron y me hicieron pagar una multa por ensuciar la ciudad. Lo primero que pensé fue que sería una broma de alguna de las ciento cincuenta cadenas de televisión que hay aquí, y después de buscar donde podría estar la cámara oculta me di cuenta de que no la había, que realmente me tenía que rendir  a la evidencia y proclamarme el más primo de los allí presentes.

Welcome to India


6 comentarios:

Anónimo dijo...

jejeje
un besin ya sabemos dnd tampoco se puede fumar tranquilo.
rosina

Anónimo dijo...

deja de fumar Berni!!! jejeje!!
Un abrazo!
barba.

Anónimo dijo...

A quien se le ocurre ir a ensuciar Mumbay!!! :-)
Un besín ya sabes de quien

Noelia dijo...

Berna, subrealista pero la cruda realidad, una colillina ensucia!!! jajaja.El resto no cuenta.
Estoy impaciente por ver fotos.
Un besín cuñadín

OverConnected dijo...

De cuanto era la multa?? Falta ese dato en esta por otro lado brillante actualización !! Y no le pusieron multa a la cabra por adelantar a la vaca?? que verguenza con dieresis si la encontrara

AROA dijo...

jajajaja... increible!!

si es que lo que no te pase a ti... dios!! jaja

Bueno majete, un besazo enorme...